El emotivo encuentro ha sido aplaudido tanto por el público del programa como por el propio invitado, David Bisbal.

El objetivo de este experimento ha sido demostrar que los prejuicios son innecesarios. El mejor ejemplo lo dan los niños, los cuáles también ha propiciado momentos de humor gracias a su inmensa curiosidad por el desarrollo de la vida cotidiana de una persona inválida.