El artista ha demostrado por qué es uno de los más queridos del panorama internacional y es que siempre tiene una sonrisa para devolver todo el cariño que le profesan sus fans. Esa humildad y cercanía se dejan ver en el escenario, donde se deja la piel con sus actuaciones y abrazando a sus seguidores.
Su carisma y simpatía causan furor a ellas y ellos y algunas personas son capaces de saltar al escenario, algo que él no se toma mal. Hace lo posible por darle un beso o un abrazo a sus fans y, eso sí, sabiendo cómo poner los límites cuando alguien intenta quedarse mucho tiempo para no impedir la continuación del show.
Con este tipo de gestos nos tiene enamorados y Sonsoles Ónega le ha pedido que venga al programa, así que habrá que esperar para saber si tampoco nos dice que "no". Además, en el 'Flash' también hemos podido saber que hay días en los que Enrique habla con sus hermanas hasta tres veces por teléfono.