La cuidadora estaba jugando con el caimán mientras los espectadores observaron el ataque del animal, que agarró con su mandíbula el brazo de la trabajadora del zoo y dio varias vueltas empujándola a la piscina.
Aunque ella intentó liberarse, fue una de las personas que estaban viendo el espectáculo quien tuvo que rescatarla. Se tumbó encima del reptil, lo inmovilizó y consiguió salvar a la adiestradora, que tuvo que ser atendida.
Dani Mateo se ha sorprendido al ver cómo los niños se quedan paralizados ante la escena: "están tan acostumbrados a ver vídeos de este tipo por internet que ya les parece de lo más normal. En mi época corríamos si veíamos algo así".